Destiempos
Improcedente, sin duda, pero en 1945, no.
Ahora que luce sol momentáneo en otro invierno de nuestro descontento, hablemos de destiempos, de fueras de lugar.
De porqué la polimanipulada reforma del Estatut de Catalunya eclipsa a la clandestina reforma laboral en ciernes.
De porqué el igualmente especulativo y depredador urbanismo en el llano no tiene tan mala prensa ecológica como desafueros e intervenciones en la montaña, cuando responden a un mismo concepto.
De porqué gran parte del Parque Grande está en perdición asumible a la par que vergonzante (por no hablar de la situación de las otras zonas o "pulmones" verdes de la ciudad), pero al Paseo San Sebastián no me lo toques.
De porqué los injustos precios de AVES ocultan la manifiesta injusticia de no tener dignos trenes convencionales y de cercanías que nos vertebren mejor.
De porqué esta creciente y orgullosa riqueza origina natural y exponencial exclusión y precariedad.
De porqué con tantos medios y canales de comunicación resulta más difícil que nunca conversar, dialogar, escuchar, negociar, acordar.
Improcedente, sin duda.
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